"EL EGO VA DE SALIDA" - Adiós Reencarnaciones

Estamos aquí por mucho más de lo que imaginamos y al mismo tiempo es realmente menos de lo que creemos estar "haciendo".

Tal vez sin darnos cuenta, a nivel global, estemos presenciando algo así como la caída final de un enorme torrente líquido bajando a través de un gran embudo. De ahí la precipitada velocidad e intensidad de cada suceso personal y colectivo que vivenciamos todos, sin excepción últimamente.

Como dice mi maestro: "el ego va de salida".

¿Por qué y para qué estamos acá? Nos preguntamos cada vez más, en nuestra intimidad interior.

Pues a mí se me figuró esta noche que estamos  sólo para que a través nuestro sean disueltos  todos los  karmas. Los propios y los ancestrales también.

Hoy día nos asomamos a un nuevo ciclo según diversas filosofías antiguas. De acuerdo a sus enseñanzas, la disolución del ego (que en verdad es colectivo) resulta inevitable para la humanidad, pues ya no cumple la función de básica de supervivencia que originalmente le fuera otorgada. Sino que esa cuota de  ego que poseen todos los seres, únicamente en el hombre se ha corrompido a tal punto que  ha transformado a la especie humana en el principal elemento de destrucción del equilibrio de la vida en el planeta Tierra. 

Por esto, debido a una simple cuestión de evolución natural, "el ego va de salida" en todos nosotros. Aunque cada quien a su manera y a su tiempo. Esto implica que, una vez disuelto  ya no reencarnemos nunca más. 

Hasta ahora reencarnábamos porque arrastrábamos durante eones de tiempo creencias acerca de situaciones que nuestro ego (por  ignorancia) suponía debía regresar a  resolver, concluir o simplemente repetir por apego situaciones, vínculos etc. 

Es así que actualmente estamos frente al gran desafío individual a la vez que colectivo, pero a la vez no existe algo que debamos "hacer" porque ya se está realizando a través nuestro.  ¿Algo confuso, no?  Bueno, si y no.

Según se me representó hoy esto es: somos solamente MEDIOS (no hacedores de absolutamente nada) a través de los cuales se van desdibujando condicionamientos, creencias, improntas nuestras pero también de nuestros clanes porque la separación es solo aparente, ya que es la humanidad  (la que está en unidad con el Todo) la que está viendo mutar aceleradamente su configuración cumpliendo con el movimiento universal en cuanto a que todo pasa por la creación, la permanencia y la transformación permanentes de  manera infinita.

Entonces, todos hoy somos apenas simples fusibles (aparentemente individuales), mediante los cuales circula toda esa serie de desechos de ésta y otras vidas  (por llamarlos de alguna manera), hasta que cada parte de ego que llevamos con nosotros tanto tiempo (supuestamente como propio) quede finalmente disuelto.

Pero ¿qué sucede con todo ese bagaje de cuestiones inconclusas, deudas pendientes y mochilas atascadas de tantos de nuestros ancestros en lo alto de nuestros árboles familiares? ¿Cómo hacen ellos para liberarse de lo que no llegaron a depurar de sus egos-karmas en vida  si ya no están y tampoco queda tiempo para que vuelvan a reencarnar?

 Y sí.  ¿¡Adivinaste!? En este tiempo de la historia cada uno de NOSOTROS llegamos aquí y ahora, para asumir el rol de canales o puentes receptores de esas deudas que nuestros ancestros no llegaron a compensar kármicamente por sí mismos. 

O sea, que para nosotros que habiamos vivido hasta hoy reaccionando por condicionamientos propios,cultrales y familiares, ahora además se nos adicionan estos nuevos circuitos solidarios para con nuestros linajes. 

Por ejemplo, puede que vivas dos situaciones cotidianas molestas aparentemente desconectadas. Una puede ser una compulsiva discusión inédita con alguien y al poco tiempo sufras un atraco. 

La discusión fue dirigida por tu abuelo a través tuyo, hacia la nieta de un viejo conocido (que es tu vecina) porque tu abuelo y el de ella (aun sin saberlo vos ni ella) abusó del abuelo de ella en una guerra. 

Entonces ante tu cotidianeidad, se monta la escena-de-trueque-reparador-ancestral a través tuyo y de ella. En en la cual ambos abuelos puedan reconstruir simbólicamente su antiguo escenario belico, para decirse y hacer lo que faltaba para saldar el karma. 

Pero al finalizar vos el altercado en este plano, te quedas con una curiosa e inexplicable sensación triunfalista, como si la pelea hubiera sido auténticamente tuya y la victoria te colocara euforicamente por encima de la parte perdedora del asunto barrial. Pero resulta que tu vecina que tiene amistades que no cuadran con la ley... queda con la sangre en el ojo...

Al mes sufrís un atraco. En verdad  ahora, detras del siniestro, está operando el abuelo-víctima  que había quedado habilitado a reaccionar luego de la discusión vecinal femenina, y a través de su-nieta-tu vecina  manda a amistades malvivientes a robarte, y así los ancestros saldan deuda karmica mediante el robo y la víctima puede cobrar su compensación  del abuso sufrido por tu abuelo en la guerra.

Por esta razón es que hoy por hoy asistimos a  un mundo cada vez mas convulsionado que nos sacude cada vez mas. 

Por eso la multiplicación de incomodidades que nos atraviesan: muchas son propias y muchas provienen de nuestro propio clan.  

Vamos raudamente hacia otra etapa evolutiva, querramos o no, lo sepamos o no. Nuestro propio karma nos trajo hasta aquí a todos nosotros aparentemente para cumplir esta función.

Pero lo mas sorprendente y paradójico es que precisamente no tenemos que hacer NADA mas que afrontar los sucesos particulares y colectivos propios-ancestrales, en principio con aceptación y consciencia sencillamente atenta, para contribuir como humildes parturientas, a que este proceso se siga llevando a cabo tal cual es, por voluntad del Absoluto en los tiempos y en la forma que toque.